Varios usuarios de la comunidad cripto han arremetido con dureza contra el New York Times (NYT) tras su publicación del 26 de diciembre, que retrata un sentimiento de simpatía hacia el fundador y ex consejero delegado de la empresa FTX, Sam Bankman-Fried.
El periodista del NYT Rob Copeland escribió el artículo utilizando una serie de citas realizadas por bahameños locales con un trasfondo positivo para SBF.
Uno de los encuestados comentó que SBF tenía «buen corazón«, mientras que se citó a algunos que dijeron que realmente «se sentían mal por él«.
Se estableció que sólo un encuestado hizo un comentario negativo sobre SBF, diciendo que los miles de millones de dólares mal administrados por SBF perjudicarían a toda la industria cripto.
Reacciones Mixtas Sobre el Artículo del NYT
El artículo recibió un par de reacciones vehementes de los principales interesados y usuarios dentro de la comunidad cripto. Cryptonator, un autoproclamado «cripto-degen» expresó su decepción por el contenido del artículo.
Cryptonator afirmó que la acción de SBF era similar a la de Pablo Escobar en sus donaciones a organizaciones benéficas locales y al gobierno. Escobar, un infame capo de la droga, también hizo donaciones a organizaciones benéficas y centros religiosos durante su época.
Otro usuario, Will Margerum, preguntó al NYT por qué se decidía a publicar un artículo tan parcial.
En la misma línea, el famoso cripto maximalista, Mack, arremetió directamente contra NYT por el artículo diciendo que es «vergonzoso».
Mientras tanto, un nativo de las Bahamas y defensor público de Nueva York, Olayemi Olurin, llegó a compartir un vídeo sobre el asunto, diciendo que NYT nunca ha dejado de decepcionar. Alegó que el NYT intentaba retratar mejor a SBF mientras criminalizaba a las naciones negras.
Sin embargo, un popular presentador de Podcast, Scott Melker, afirmó que el artículo era totalmente absurdo e inapropiado, subrayando que NYT se ha convertido en el National Inquirer.
Aunque el artículo del NYT ha sido recibido con reacciones encontradas, la neutralidad debería ser el sello distintivo a la hora de informar sobre acontecimientos delicados relacionados con el sector de las criptomonedas. Esto debería ser bien defendido por las partes interesadas.