El fundador y CEO de Telegram, Pavel Durov, ha revelado que su considerable patrimonio y estilo de vida no provienen de su exitosa aplicación de mensajería, sino de una temprana y masiva inversión en Bitcoin. Durante una reciente entrevista con Lex Fridman, el empresario tecnológico compartió detalles sobre su filosofía financiera, confirmando que la relación entre Pavel Durov y Bitcoin es la base de su independencia económica desde hace más de una década.
Durov explicó en un podcast que adquirió «miles de bitcoins» en 2013, cuando el valor de la criptomoneda pionera rondaba los 700 dólares por unidad. Esta decisión estratégica le ha permitido mantenerse a flote financieramente, cubriendo sus gastos personales y operativos sin necesidad de extraer capital de Telegram. La revelación desmiente las especulaciones sobre si los fondos de la popular plataforma de mensajería eran utilizados para costear sus actividades, como el alquiler de oficinas o sus viajes privados.
¿Por qué apostó Durov por Bitcoin?
Más allá de la evidente ganancia financiera, la apuesta de Durov por Bitcoin se fundamenta en una profunda convicción ideológica. Él considera que los activos digitales como Bitcoin son el verdadero dinero, ya que operan al margen del control gubernamental. «Nadie puede confiscar tu Bitcoin. Nadie puede censurarte por razones políticas», afirmó, destacando las propiedades de resistencia a la censura e incautación que ofrecen las criptomonedas descentralizadas frente a las monedas fiduciarias.
Este respaldo no es solo una declaración, sino una filosofía que ha guiado sus decisiones empresariales. En el pasado, Durov y su equipo intentaron lanzar su propia Blockchain, la Telegram Open Network (TON), por considerar que ni Bitcoin ni Ethereum eran lo suficientemente escalables para sus cientos de millones de usuarios. Aunque el proyecto fue frenado por reguladores en Estados Unidos, la tecnología sigue viva hoy como The Open Network, demostrando el compromiso continuo de Pavel Durov y Bitcoin con el ecosistema.
Una visión a futuro para la economía digital
El análisis de Durov sobre el futuro de la economía global es decididamente alcista para los activos digitales. En su opinión, mientras los gobiernos continúen «imprimiendo dinero como si no hubiera un mañana», el valor de las criptomonedas con una emisión predecible y finita, como Bitcoin, seguirá aumentando. De hecho, proyectó que el precio del activo podría eventualmente alcanzar el millón de dólares. Para el CEO, la escasez programada de Bitcoin es su mayor fortaleza, sentenciando que «Bitcoin llegó para quedarse».
Esta perspectiva subraya la creciente desconfianza en los sistemas financieros tradicionales y posiciona a las criptomonedas como un refugio de valor clave para el futuro. La estrategia de Pavel Durov y Bitcoin no solo ha demostrado ser increíblemente rentable, sino que también envía un poderoso mensaje al mercado sobre la viabilidad y la importancia de los activos digitales. Su historia de éxito refuerza la narrativa de Bitcoin como una herramienta fundamental para la soberanía financiera en la era digital, inspirando a una nueva generación de inversores.