Iren anunció hoy un monumental acuerdo de $9.7 mil millones con Microsoft, una compañía de «neocloud». Este acuerdo es para la compra de capacidad de nube para IA. La noticia valida la creciente transición de mineros de Bitcoin a IA como un movimiento estratégico clave en el sector tecnológico. Las acciones de IREN reaccionaron al alza inmediatamente.
El contrato tendrá una duración de cinco años. Según los términos, Microsoft obtendrá acceso a sistemas de IA basados en Nvidia GB300. Estos sistemas estarán alojados en las instalaciones de IREN en Texas. Para cumplir con el acuerdo, IREN realizará una inversión masiva. Comprará $5.8 mil millones en GPUs (unidades de procesamiento gráfico) de Dell Technologies. Además, IREN, anteriormente conocida por sus operaciones de minería de Bitcoin, espera generar ingresos anualizados de $1.9 mil millones gracias a este contrato.
Este acuerdo marca una de las validaciones comerciales más grandes para el emergente sector «neocloud». Este término se refiere a empresas de centros de datos que evolucionaron desde la minería de Bitcoin. IREN se une así a otras compañías como CoreWeave y Crusoe. Estas firmas están reutilizando su infraestructura de alto consumo energético para satisfacer las cargas de trabajo de inteligencia artificial. El movimiento es significativo, ya que demuestra cómo el hardware antes volátil de la minería se ve ahora como un activo estratégico.
¿Es el hardware de minería el nuevo pilar de la infraestructura de IA?
La decisión de Microsoft subraya una realidad crítica del mercado tecnológico actual. Existe una escasez global de capacidad de GPU. Gigantes como Microsoft necesitan urgentemente más poder de cómputo para sus servicios, como Azure AI. Por ende, están recurriendo a contratos de arrendamiento con estos nuevos proveedores «neocloud». Estos proveedores cierran la brecha entre el blockchain y la IA. Utilizan su experiencia en la gestión de operaciones energéticas a gran escala para un nuevo fin.
La reacción del mercado fue inmediata y contundente. Las acciones de IREN se dispararon más del 30% en las operaciones previas a la apertura del mercado. Este repunte se suma a un impresionante rally del 500% acumulado este año. Este auge ha sido impulsado casi en su totalidad por la demanda de hardware para IA. El acuerdo no solo beneficia a IREN. También establece un precedente para otras compañías de minería que buscan diversificar sus flujos de ingresos.
Este acuerdo multimillonario podría ser el catalizador definitivo. La transición de mineros de Bitcoin a IA ya no es una tendencia especulativa. Ahora es una estrategia empresarial validada al más alto nivel. Se espera que más mineros exploren esta ruta, transformando el panorama de la infraestructura digital. La sinergia entre la infraestructura de minería y la demanda de IA parece ser una de las narrativas dominantes de 2025.
