Bitcoin, la criptomoneda más grande del mundo por capitalización de mercado, ha estado experimentando una tendencia a la baja en las últimas semanas. Sin embargo, no todos los inversores se desaniman por el sentimiento bajista, ya que algunos holders más pequeños, conocidos como camarones o «shrimps», han estado acumulando más Bitcoin a pesar de la caída de los precios.
Los Shrimps Nadan Contra la Corriente
Según informes recientes, los shrimps son direcciones de Bitcoin que contienen menos de 1 BTC. El informe cita datos de Glassnode, una plataforma de análisis de blockchain, que muestra que la cantidad de shrimps ha aumentado un 8,9 % desde el 10 de noviembre, alcanzando un nuevo máximo de más de 8,7 millones de direcciones. Esto indica que más inversores minoristas están ingresando al mercado de Bitcoin o aumentando su exposición a la criptomoneda.
El informe también señala que los shrimps han estado más activos que las ballenas, que son direcciones de Bitcoin que contienen más de 1000 BTC. Mientras que las ballenas han estado vendiendo sus Bitcoin en el último mes, los shrimps han estado comprando más BTC a precios más bajos, lo que demuestra su confianza en el valor a largo plazo de la criptomoneda.
Una posible razón de esta divergencia en el comportamiento es que los shrimps tienen un costo de oportunidad más bajo que las ballenas, quienes pueden tener otras opciones de inversión o necesidades de liquidez. Los shrimps también pueden tener un horizonte de tiempo más largo que las ballenas, que pueden ser más sensibles a las fluctuaciones de precios a corto plazo o al sentimiento del mercado.
Otra posible razón es que los camarones están más influenciados por las redes sociales o la presión social que las ballenas, quienes pueden tener más conocimiento o experiencia profesional o institucional. Los shrimps pueden estar siguiendo el consejo o el ejemplo de destacados defensores o personas influyentes de Bitcoin, como Elon Musk, Michael Saylor o Jack Dorsey, quienes han expresado su apoyo a Bitcoin y su potencial para revolucionar el mundo.
Cualquiera que sea la razón, los shrimps parecen estar desafiando las tendencias del mercado y mostrando su resiliencia y optimismo frente a la volatilidad y la incertidumbre. Queda por ver si esta estrategia valdrá la pena, a largo plazo, pero está claro que los shrimps no se darán por vencidos con Bitcoin en el corto plazo.