Una violenta venta masiva borró $300 mil millones del mercado cripto. Sin embargo, y de forma contraintuitiva, son los osos de Bitcoin (vendedores en corto) quienes ahora enfrentan un peligro creciente. La extrema volatilidad y el drenaje de liquidez, según los datos analizados, han disparado la fragilidad del mercado de Bitcoin a niveles críticos.
El colapso del sentimiento es evidente. El Crypto Fear & Greed Index marcó 23, una lectura de «miedo extremo» que suele preceder a la capitulación. Esta vez, la presión vendedora vino acompañada de una fuerte retirada institucional. Los ETF de Bitcoin al contado registraron salidas netas de $1.4 mil millones. El iShares Bitcoin Trust de BlackRock lideró estas salidas con $400 millones. Además, el interés abierto en futuros de Bitcoin se redujo en más de $25 mil millones desde su pico de octubre, secando la liquidez.
Esta venta masiva no fue un evento aislado. Los tenedores a largo plazo (LTH) de Bitcoin, una cohorte tradicionalmente resistente, vendieron $45 mil millones en el último mes. Esto sugiere una profunda erosión de confianza. Asimismo, las liquidaciones de posiciones apalancadas alcanzaron entre $19 mil y $20 mil millones, forzando ventas. Factores macro, como una lectura del PCE del 2.7% y la fortaleza del dólar, amplifican la aversión al riesgo global.
¿Por qué un mercado bajista es ahora peligroso para los propios osos?
El peligro para los bajistas (osos) no proviene de un repunte fundamental, sino de la pura iliquidez. La fragilidad del mercado de Bitcoin significa que la volatilidad es extrema. Con menos capital institucional para absorber shocks (demostrado por las salidas de ETF), los movimientos de precios son más erráticos. Esto aumenta el riesgo de ‘short squeezes’ (liquidaciones de cortos) o de no poder cerrar posiciones cortas rentablemente cuando la liquidez desaparece.
El mercado de criptomonedas se encuentra en una encrucijada delicada. Aunque los precios han caído, la estructura subyacente del mercado muestra grietas. Las próximas semanas serán cruciales para monitorear los flujos de ETF y el interés en futuros. Estos datos indicarán si la fragilidad del mercado de Bitcoin se estabiliza o si los osos detectaron correctamente un riesgo sistémico que ahora los amenaza a ellos también.
