El colapso de FTX, uno de los exchanges de criptomonedas más grandes del mundo, ha planteado serias dudas sobre la confiabilidad y la regulación de la industria de las criptomonedas. La última revelación del proceso de quiebra en curso es que FTX gastó la asombrosa cantidad de $400 millones para adquirir su sucursal europea, que supuestamente era una empresa fantasma sin valor real.

Según una denuncia presentada por los inversionistas de FTX, que buscan recuperar sus fondos del exchange, el fundador y ex director ejecutivo de FTX, Sam Bankman-Fried (SBF), y sus asociados utilizaron Alameda Research, una firma de trading de criptomonedas, para comprar Digital Assets DA. AG (DAAG), una empresa suiza que luego se convirtió en FTX Europe.

La denuncia afirma que DAAG tenía negocios limitados y ninguna propiedad intelectual y que SBF pagó en exceso por cientos de millones de dólares.

Alegaron que el motivo principal detrás de la adquisición fue obtener una licencia europea para FTX al poseer una empresa local. Según la demanda, DAAG facilitó la adquisición por parte de FTX de una licencia operativa chipriota mediante la compra de otra empresa local por 2 millones de euros (2,2 millones de dólares). Esta es una de las alegaciones que los demandantes han hecho contra los demandados en su demanda por daños y perjuicios.

La denuncia también acusa a FTX de pagar millones de dólares a DAAG, que se convirtió en FTX Europe, por «servicios de TI y consultoría» que nunca se prestaron.

Los Demandantes Exigen el Pago Completo

Los demandantes exigen al menos 323,5 millones de dólares a los demandados, que son los cofundadores y ex altos ejecutivos de DAAG convertidos en FTX Europe. La demanda argumenta que cada una de las transferencias en el acuerdo de DAAG se realizó con la intención de defraudar a los acreedores de FTX y que deben evitarse y recuperarse en beneficio del estado de quiebra de FTX.

Esta no es la primera vez que FTX y sus subsidiarias enfrentan problemas legales desde que el intercambio se declaró en bancarrota en noviembre de 2022. SBF está esperando dos juicios penales por su papel en los presuntos delitos, mientras que la ex directora ejecutiva de Alameda Research, Caroline Ellison, y FTX co- el fundador Gary Wang se declaró culpable de cargos de fraude en diciembre de 2022.

El caso de FTX muestra cómo la industria de las criptomonedas todavía está plagada de falta de transparencia y responsabilidad. Si bien los entusiastas de las criptomonedas pueden celebrar la innovación y la disrupción que brindan las criptomonedas, también deben ser conscientes de los riesgos y desafíos que conlleva.