La comunidad de las criptomonedas se ha visto sacudida por el cierre repentino de Inferno Drainer, un servicio especializado en el robo de monedas digitales que ha generado pérdidas de casi 70 millones de dólares durante este año.
Esta plataforma, que ofrecía herramientas para el vaciado de monederos de criptomonedas mediante técnicas de phishing, ha anunciado su cese definitivo después de una operación turbulenta que ha afectado a más de 100,000 personas.
La noticia llega tras un mensaje publicado en Telegram el 26 de noviembre por el equipo detrás de Inferno Drainer, declarando que era «hora de seguir adelante».
Aunque aseguran el cese de sus operaciones, dejan la infraestructura intacta para permitir a los usuarios una transición sin contratiempos hacia otros servicios similares.
El modus operandi de Inferno Drainer consistía en ofrecer software diseñado para vaciar monederos de criptomonedas, obteniendo una comisión del 20% de las ganancias generadas por los usuarios a través del robo.
Esta práctica ilegal ha levantado la preocupación de la comunidad y de autoridades como el FBI
Las autoridades ha alertado sobre las estafas de phishing y los secuestros de cuentas en redes sociales dentro del ámbito de las criptomonedas.
CertiK, una firma de seguridad en Blockchain, ha identificado a Inferno Drainer como uno de los kits de phishing más dañinos en la comunidad, señalando también la existencia de otros servicios similares activos como Pink Drainer y Angel Drainer.
Este último, incluso, lanzó recientemente una actualización para ampliar su alcance y facilitar el vaciado de monederos en diversas blockchain’s.
El cierre de Inferno Drainer sigue al precedente establecido por Monkey Drainer, otro servicio similar que cerró sus operaciones en marzo de este año, argumentando que era «hora de pasar a algo mejor».