Los principales mercados de activos digitales, liderados por Ethereum, Solana y Cardano, registran descensos notables impulsados por una toma de ganancias de fin de año generalizada. Jeff Mei, director de operaciones de BTSE, atribuye esta corrección a la vacilación de los inversores ante señales mixtas macroeconómicas, lo que ha generado un entorno de cautela que arrastra a las altcoins.
Durante la jornada dominical, aunque Bitcoin retrocedió hacia los 89.600 dólares, el impacto fue porcentualmente más severo en el mercado alternativo. Ether descendió hasta la zona de los 3.120 dólares mostrando debilidad relativa, mientras que activos de alta capitalización como Solana, Cardano y Dogecoin registraron pérdidas cercanas al 2%. Este comportamiento bajista generalizado coincide con volúmenes de negociación que se han reducido notablemente en las sesiones recientes, amplificando la volatilidad de los precios y reforzando un tono defensivo en todo el espectro criptográfico.
Por otro lado, esta tendencia negativa no es un hecho aislado del ecosistema, sino que responde a preocupaciones macroeconómicas sobre las valoraciones tecnológicas y la sostenibilidad de las ganancias corporativas. Jeff Mei destaca que, dado el inminente cierre del ejercicio fiscal, los operadores están optando por asegurar beneficios líquidos ahora, postergando la apertura de nuevas posiciones hasta 2026. Además, los inversores muestran dudas tras la caída de octubre y ante el temor de un mercado bursátil estadounidense que muchos analistas consideran actualmente sobrevaluado por el gasto en inteligencia artificial.
¿Podrá la Baja Liquidez Exagerar las Caídas de las Principales Altcoins?
Asimismo, la profundidad del mercado se ha convertido en un factor de riesgo adicional para tokens como SOL y ADA. Augustine Fan, jefe de insights en SignalPlus, advierte que la escasa liquidez actual podría exacerbar los movimientos descendentes en las próximas semanas.
Según su análisis, la venta masiva es una continuación del sesgo negativo reciente, donde Bitcoin y Ether actúan como proxy de cobertura para el resto de los tokens de menor capitalización. Fan sugiere evitar la sobreinterpretación de las oscilaciones horarias, aunque reconoce que el sentimiento general sigue siendo profundamente negativo en este momento.
Finalmente, se anticipa que la presión vendedora sobre el sector de las criptomonedas persista hasta el inicio del nuevo año, con una resistencia menor apuntando a precios más suaves para los activos alternativos. No obstante, los flujos netos positivos en los ETF y el soporte de liquidez de los bancos centrales podrían ofrecer un contrapeso fundamental. De este modo, aunque el cierre de año se presenta desafiante y volátil, el mercado podría encontrar un entorno más constructivo y estable una vez que los volúmenes de negociación se normalicen plenamente a principios de 2026.
