El abogado Jeremy Hogan, experto en derecho de valores, está haciendo olas en la comunidad cripto con su audaz declaración: «¡XRP no es un valor!». Según Hogan, la Comisión del Mercado de Valores de Estados Unidos (SEC) no ha proporcionado un argumento legal convincente para demostrar que XRP es realmente un valor.
Hechos jurídicos complicados
El tweet de Hogan destaca un punto crítico: XRP solo posiblemente puede encajar en la definición de «contrato de inversión» basado en la definición legislativa de valor, y esa es la noticia que esperábamos como comunidad. Sin embargo, no es una acción o un bono. Incluso la SEC admite este punto al utilizar el término «contrato de inversión«. Así que la pregunta es, ¿Cumple el XRP la definición de contrato de inversión?
La SEC no ha aportado ninguna prueba de un contrato implícito o explícito de inversión en el caso Ripple. En su lugar, la SEC argumenta que el contrato de compra es suficiente para demostrar que XRP es un valor.
Sin embargo, Hogan argumenta que esta lógica separa la «inversión» del «contrato«. Una simple compra, sin más, no puede ser un «contrato de inversión«, ya que no hay ninguna obligación para Ripple de hacer nada excepto transferir el activo.
La ausencia de jurisprudencia directa en la materia ha complicado la cuestión. Sin embargo, todos los casos de «cielo azul» que dictan la definición de «contrato de inversión» tenían un «contrato» relativo a la «inversión«. La prueba de las cuatro partes, que se cita a menudo, también implica que se requiere un «contrato» de algún tipo. Por lo tanto, sin ninguna obligación contractual, un comprador no puede «confiar razonablemente» en que un oferente le proporcione un beneficio cuando el oferente no cumple.
Para aclarar, la designación «valor» no pretende proteger a un posible inversor de tomar malas decisiones. La legislación sobre valores sólo obliga a los oferentes a informar sobre el contrato que suscribe el comprador.
La cuestión NO es si Ripple utilizó dinero de la venta de XRP para financiar su negocio. La cuestión es si la SEC ha demostrado que existía un «contrato» implícito o explícito entre Ripple y los compradores de XRP en relación con su «inversión.»
¿El veredicto? No existía tal contrato. Por lo tanto, ¡XRP no es un valor! El análisis de Hogan ha puesto a la comunidad de criptomonedas en ebullición y queda por ver qué hará la SEC a continuación. Pero por ahora, el argumento de Hogan se mantiene firme, y los entusiastas del XRP pueden estar tranquilos sabiendo que su amada criptodivisa no es un valor después de todo.
Es importante señalar que la opinión de Hogan es solo eso: una opinión. El caso está todavía en curso, y los tribunales decidirán en última instancia si el XRP es o no un valor. Aunque el análisis de Hogan es convincente, es importante esperar a la sentencia definitiva del tribunal antes de sacar conclusiones.
El proceso judicial puede ser largo y complicado, y no se sabe cuánto tardará en resolverse este caso.