DoubleZero arrancó su mainnet beta el 2 de octubre de 2025, con un enfoque en infraestructura de transporte para cadenas. La red usa fibra óptica reservada para conectar nodos y evitar el tránsito por internet pública, lo que reduce interferencias del entorno abierto. El objetivo es ofrecer menor latencia y menos paquetes perdidos para validadores y aplicaciones blockchain, con impacto directo en operadores de infraestructura, validadores y compradores de tokens de redes físicas.
La compañía despliega 71 enlaces de alta velocidad en 25 ciudades y dos anillos de fibra conectan los puntos de presencia para resiliencia y continuidad. Los nodos de borde descartan cerca del 70% de mensajes spam antes de llegar al núcleo, aliviando la carga del backbone. La capa “N1” no es una blockchain L1 ni L2: es una base de transporte sobre la que otras cadenas montan sus validadores, separando el plano de datos del consenso. Durante el testnet, que operó en siete ciudades, la red registró tiempos de propagación más bajos que sobre internet abierta.
La menor latencia y el control físico del tránsito apuntan a mejorar la estabilidad operativa de validadores y de quienes alojan nodos. Mainnet-beta es una versión en producción que aún admite ajustes.
Modelo económico, financiación y regulación
La ronda de 28 millones de dólares fue copatrocinada por Multicoin Capital y Dragonfly Capital, con participación de Jump Crypto, Galaxy, RockawayX y Jito. El token 2Z paga a operadores de fibra y a quienes alojan nodos, y Proof of Utility (PoU) distribuye recompensas midiendo bytes transferidos y tiempo de actividad —no la cantidad de tokens bloqueados—, alineando incentivos con capacidad y servicio prestado. Proof of Utility es un algoritmo que entrega tokens a quienes aportan ancho de banda y hardware verificable.
La menor latencia y el control físico atraerán a validadores afectados por retrasos en la red pública. El respaldo de fondos conocidos y la existencia del token 2Z pueden facilitar recaudación y listados, pero la demanda real de enlaces determinará el precio. Los lanzamientos de mainnet suelen caer si no muestran uso inmediato, y la carta de no action que la SEC emitió al equipo, reduce la incertidumbre aunque no blinda ante futuras investigaciones.
La mainnet beta pone a prueba si la mejora técnica se traduce en usuarios reales. Para justificar la inversión y validar el modelo, la red necesita masa crítica de validadores y de proveedores de fibra, condición que determinará su adopción y sostenibilidad.