Cinco mineros obtuvieron recompensas superiores a 350.000 USD durante 2025 por validar bloques de Bitcoin, un resultado que muestra que la participación directa aún es posible. La probabilidad de éxito sigue siendo mínima, pero los episodios reafirman que la recompensa íntegra permanece disponible para el que encuentre cada bloque.
A lo largo de este 2025, se encontraron varios bloques minados que dieron pagos muy elevados. El bloque 913.593 entregó 3,13 BTC, equivalentes a unos 347.980 USD. En julio, el 907.283 extraído desde Solo CKPool dejó cerca de 373.000 USD. En marzo, un dispositivo Bitaxe validó un bloque que reportó alrededor de 257.963 USD. Dos ejemplos más, los bloques 910.440 y 913.632, otorgaron entre 3,13 y 3,15 BTC, valores cercanos a 350.000 USD por cada uno.
La probabilidad estimada para un minero independiente es de 1 oportunidad entre 2.800, un reflejo de la masa de hashrate concentrada en pools industriales. El hashrate mide la potencia de cómputo destinada a validar; cuanto mayor sea, más probable es hallar un bloque. Estos cinco casos señalan que la combinación de suerte, eficiencia y costes energéticos competitivos puede convertir un evento improbable en un ingreso notable.
¿Cómo hicieron para obtener estas ganancias?
Para que esto suceda se deben dar, principalmente, cuatro factores clave: la potencia de minado disponible, el precio de la electricidad, la eficiencia del equipo y la cotización de Bitcoin, que fija el valor en dólares de la recompensa.
El minero individual asume todo el riesgo y, si encuentra un bloque, cobra la totalidad: 3,125 BTC más las comisiones correspondientes. Este esquema incentiva la participación directa, aunque expone a largos periodos sin ingresos. La naturaleza aleatoria de la búsqueda de bloques sigue siendo decisiva, por lo que el resultado depende tanto de la estadística como del tiempo de actividad y la eficiencia del hardware.
En síntesis, la minería en solitario puede otorgar pagos importantes pero no cambia la estructura del mercado. Su sostenibilidad dependerá de la evolución del hashrate global, el ajuste de dificultad y el precio de Bitcoin, lo que determina si estos logros seguirán ocurriendo o quedarán como excepciones cada vez más raras.