Bitcoin mostró una volatilidad reciente y analistas advirtieron sobre el riesgo de liquidaciones de posiciones largas, mientras que el oro alcanzó los $3,7K por primera vez, reavivando el debate sobre su papel como refugio y el de BTC como «oro digital», según medios especializados. La ruptura de la correlación en 2025 y el desempeño divergente sugieren una reasignación de flujos entre refugio tradicional y activos digitales.
Correlación en retroceso y desempeño relativo
Entre noviembre de 2022 y noviembre de 2024, Bitcoin y el oro tuvieron movimientos correlacionados, pero esa relación se rompió en 2025. Según datos citados por Institutional Investor, el oro había subido un 16 % a finales de marzo de 2025, as Bitcoin se había depreciado más de un 6 %. Esta diferencia altera la idea de usar BTC como cobertura frente a la incertidumbre macro.
La correlación a corto plazo también ha bajado. Según Glassnode, la correlación a 30 días entre Bitcoin y el oro descendió hasta -0,53, lo que indica que ambos activos se han movido en direcciones opuestas en periodos recientes. Factores como la política de la Reserva Federal, las tensiones geopolíticas y las condiciones de liquidez, según el análisis de los expertos, pueden explicar el cambio, ya que cada uno afecta la demanda de activos de riesgo frente a los de refugio.
Derivados, liquidaciones y niveles a vigilar
El mercado de derivados amplifica la exposición. Jina recoge advertencias de analistas sobre el riesgo de liquidaciones impulsadas por el apalancamiento, la alta volatilidad y la concentración de posiciones. Un aumento en las liquidaciones cortas se ha asociado, en algunos episodios, con repuntes de precio, según expertos. La misma dinámica puede invertirse y desencadenar caídas pronunciadas si se liquidan posiciones largas apalancadas.
Por ejemplo, la aprobación judicial para la venta de BTC vinculada a Silk Road, mencionada en el análisis, puede añadir presión temporal sobre la liquidez y la volatilidad del mercado. Esto eleva la importancia de vigilar el interés abierto, los niveles de soporte y los próximos vencimientos en derivados.
La ruptura de correlación y el avance del oro plantean un entorno donde la gestión del apalancamiento y la vigilancia de métricas clave serán determinantes. Para traders y gestores, el riesgo operativo es el apalancamiento, as amplifica las ganancias y las pérdidas; para inversores de largo plazo, la divergencia invita a revisar la función de BTC en carteras que buscan cobertura inflacionaria o geopolítica. Los próximos vencimientos de derivados y los niveles de soporte técnico serán puntos a vigilar para evaluar si las liquidaciones continuarán marcando el pulso del mercado.