Un fallo de comunicación y un cambio en las herramientas de intercambio del protocolo ha generado tensiones entre la comunidad de gobierno de Aave y su principal desarrolladora, Aave Labs, por el destino de decenas de millones de dólares en ingresos estimados anualmente.
El protocolo de finanzas descentralizadas (DeFi) Aave se encuentra en medio de una intensa controversia de gobernanza luego de una decisión de su principal empresa de desarrollo, Aave Labs, de reemplazar la infraestructura de intercambio integrada en la interfaz principal del protocolo.
Este cambio técnico —que sustituyó a ParaSwap por CoW Swap como motor para ejecutar operaciones— ha provocado que una fuente de ingresos que beneficiaba al tesoro de la Aave DAO deje de fluir hacia la organización autónoma, lo que, según estimaciones de delegados del gobierno, equivale a aproximadamente 10 millones de dólares anuales.
Los miembros de la DAO —la entidad descentralizada que gobierna las reglas fundamentales y contratos inteligentes del protocolo— sostienen que esta integración no fue consultada ni aprobada mediante votación comunitaria, lo que consideran una violación de los principios de gobernanza compartida de Aave. El impacto semanal estimado de los ingresos perdidos ronda los 200.000 dólares, un flujo que antes generaba ParaSwap mediante comisiones de referencia para la tesorería.
Conflicto de gobernanza de Aave: alcance y riesgos inmediatos
Marc Zeller, fundador de la iniciativa Aave Chan, fue particularmente crítico al calificar el movimiento como una suerte de “privatización encubierta” de activos de marca y oportunidades económicas que pertenecen a los poseedores del token AAVE. Para Zeller y otros delegados, la falta de comunicación efectiva y de participación en la toma de decisiones podría allanar el camino para que futuras actualizaciones —como la próxima versión V4 del protocolo— reserven funciones o ingresos que antes eran parte del ecosistema común de la DAO.
Por su parte, Aave Labs ha defendido la decisión argumentando que los ingresos generados por la anterior integración no eran una “tarifa de protocolo obligatoria,” sino un excedente discrecional que la empresa había venido donando a la DAO. Asimismo, enfatizó que la interfaz web del protocolo es un producto propio financiado y mantenido por la firma, que asumió los costos de ingeniería y seguridad, y que por lo tanto tiene derecho a monetizar esa infraestructura para garantizar su sostenibilidad.
Aave Labs también afirmó que el cambio a CoW Swap no fue motivado por obtener ingresos adicionales, sino por ofrecer mejores precios de ejecución y mayor protección contra MEV (valor máximo extraíble) para los usuarios de Aave, aunque reconoció que falló en comunicar adecuadamente el alcance de este cambio.
