El ecosistema de criptoactivos está experimentando rápidos cambios e innovaciones que plantean nuevos desafíos y riesgos para los reguladores y las autoridades de estabilidad financiera.

Criptoconglomerados en la mira de la ESRB

Los criptoconglomerados se han convertido en grandes y complejas entidades en los últimos años. Algunos de estos conglomerados han crecido hasta alcanzar un tamaño y una escala que podrían plantear riesgos sistémicos si fallan o funcionan mal. Una de las mejores cosas que ha surgido de la industria de las criptomonedas son las DeFi, que utilizan smart contracts para facilitar las transacciones y los acuerdos entre los usuarios.

Con el mundo de las criptomonedas en constante evolución y sus muchos beneficios para la libertad financiera individual, los gobiernos de todo el mundo necesitan cada vez más exigir regulaciones y escrutinio para estos conglomerados. La Junta Europea de Riesgo Sistémico (ESRB, por sus siglas en inglés), dirigida por Christine Lagarde, presidenta del Banco Central Europeo, emitió un informe el jueves que destacaba los peligros potenciales de los préstamos y participaciones en criptomonedas, así como el alto apalancamiento en los mercados de activos digitales, a la luz de la próxima regulación de Mercados en Criptoactivos (MiCA) que entrará en vigor en la UE en 2024.

El informe recomienda que las autoridades supervisen las actividades y las interrelaciones de los criptoconglomerados, evalúen su importancia y resiliencia sistémicas, y se aseguren de que cumplan con las normas existentes sobre antilavado de dinero, protección del consumidor, integridad del mercado y requisitos prudenciales.

La UE Cree en Regulaciones Más Estrictas

El informe también sugiere que las autoridades deben desarrollar un marco integral para DeFi que cubra el estado legal y la exigibilidad de los smart contracts, la identificación y responsabilidad de los proveedores y usuarios de servicios, la supervisión y supervisión de las plataformas y protocolos DeFi, y la coordinación y cooperación entre autoridades nacionales e internacionales.

De acuerdo con el MiCA, las empresas que brindan distintos tipos de servicios, como los de negociación y custodia, tienen que hacer frente a los posibles conflictos de interés que puedan surgir entre sus líneas de negocio. Sin embargo, la ESRB señaló que no existe una obligación general de identificar y gestionar los riesgos operativos o de reputación que podrían acumularse al ofrecer dichos servicios.

El informe de la ESRB es solo otro intento de las instituciones tradicionales de regular la totalidad del ecosistema criptográfico y las muchas libertades financieras que ofrece. A medida que el ecosistema de criptoactivos continúa evolucionando e innovando, los reguladores y supervisores continuarán con sus intentos de imponer regulaciones y escrutinios innecesarios.