La recuperación del mercado cripto se consolida con un cuarto día consecutivo de ganancias que eleva la capitalización total del sector a 3,2 billones de dólares. Según los analistas de Glassnode, aunque el mercado permanece en una fase de consolidación defensiva, la demanda fresca y el alivio macroeconómico están reconfigurando la estructura de precios actual favorablemente.
Bitcoin lidera este repunte cotizando a 91.506 dólares tras un alza del 4,7%, mientras que Ethereum acompaña la tendencia recuperando el nivel de los 3.027 dólares. Przemysław Kral, CEO de ZondaCrypto, destaca que la limpieza del apalancamiento eliminó a los especuladores a corto plazo, permitiendo la entrada estratégica de inversores institucionales con mayor convicción en el valor subyacente. Además, el optimismo es generalizado, ya que 88 de las 100 principales monedas registraron números verdes, con Kaspa disparándose un impresionante 20,8% en las últimas 24 horas.
¿Podrá la liquidez institucional sostener este repunte ante los cambios de la Fed?
Este rebote ocurre en un contexto global dinámico donde Bolivia ha marcado un hito histórico al revertir su prohibición sobre activos digitales. El país sudamericano ahora se prepara para integrar las criptomonedas en su sistema bancario, comenzando con las stablecoins. Simultáneamente, las expectativas de política monetaria en Estados Unidos han cambiado drásticamente, con un 85% del mercado anticipando ahora un recorte de tasas en diciembre. Los analistas de Bitunix sugieren que el foco ha pasado de la política a la batalla técnica entre alcistas y bajistas en zonas de liquidez clave.
La confianza institucional se refleja claramente en los productos de inversión regulados, sumando entradas netas significativas esta semana. Específicamente, BlackRock lideró los flujos positivos en los ETF de Bitcoin y Ethereum durante la jornada del miércoles, inyectando capital fresco al ecosistema. Por su parte, la firma Strategy, el mayor tenedor corporativo de Bitcoin, lanzó un nuevo panel de calificación crediticia para tranquilizar a los inversores sobre su deuda. Si el precio logra romper la resistencia técnica de 93.966 dólares, podríamos ver un rápido ascenso hacia el objetivo de 97.000 dólares en el corto plazo.
El sentimiento general del mercado ha mejorado ligeramente, aunque el índice de miedo y codicia sugiere que la cautela sigue dominando entre los operadores. Los inversores deben vigilar de cerca la volatilidad antes de la reunión de diciembre, pues la absorción de precios en el rango superior definirá la tendencia definitiva para el cierre del año.
