Un nuevo análisis de JPMorgan sugiere que la reciente caída del mercado de criptomonedas no fue impulsada por inversores institucionales tradicionales, sino por actores “nativos” del ecosistema cripto. Esto marca un cambio relevante: quienes operan habitualmente dentro del mundo de los activos digitales están ejerciendo cada vez más influencia sobre los movimientos de precios, especialmente en momentos de alta volatilidad. A continuación, repasamos los principales hallazgos del informe y sus implicancias para el futuro del mercado.
Según el informe, los fondos cotizados en bolsa (ETF) de Bitcoin y los mercados regulados de futuros de la criptomoneda mostraron salidas moderadas durante la corrección. Sin embargo, los productos vinculados a Ethereum registraron una reducción más pronunciada, reflejando que el impacto fue mayor sobre las altcoins que sobre Bitcoin.
El mayor golpe se observó en los futuros perpetuos: el interés abierto en los contratos de Bitcoin y Ethereum se desplomó alrededor de un 40 %, un ritmo más rápido que la caída del precio al contado. Este comportamiento sugiere que las posiciones apalancadas, mantenidas principalmente por operadores nativos del ecosistema cripto, se liquidaron de forma masiva.
Cuando los flujos internos superan la presión institucional
JPMorgan destaca que este tipo de correcciones internas podrían volverse más frecuentes a medida que el mercado cripto se vuelva más complejo y líquido. Cuando los movimientos de precios son liderados por participantes directamente involucrados en el ecosistema digital, los modelos de riesgo tradicionales —basados en el flujo institucional— pierden capacidad de predicción.
El informe también advierte que los tokens más especulativos podrían sufrir caídas más pronunciadas ante cambios de sentimiento entre los operadores cripto. En otras palabras, la liquidez nativa del mercado se ha convertido en un factor clave para entender los episodios de volatilidad extrema.
En síntesis, el análisis de JPMorgan revela una transformación estructural: el mercado de criptomonedas está volviéndose cada vez más autorreferencial. Las oscilaciones de precios ya no dependen tanto de factores externos, sino del comportamiento de los propios actores del ecosistema. Comprender cómo operan y reaccionan los traders nativos será esencial para anticipar los próximos movimientos del mercado.