Cipher Mining ha fijado el precio de una emisión privada ampliada de notas convertibles por 1.100 millones de dólares, una operación que modifica su estructura de capital y vincula a los inversores con su plan de infraestructura. Las notas son senior, devengan 0,00 % y vencen el 1 de octubre de 2031, con liquidación prevista para el 30 de septiembre de 2025. El tamaño y las condiciones del instrumento inciden en la dilución accionaria y el financiamiento de centros de datos y capacidades HPC.
La emisión se elevó desde 800 millones hasta 1.100 millones de dólares. Las notas no pagan intereses y vencen el 1 de octubre de 2031. La tasa de conversión inicial es de 62,3733 acciones por cada 1.000 dólares de principal, equivalente a 16,03 dólares por acción, un 37,5 % por encima del cierre de 11,66 dólares del 25 de septiembre de 2025. Una nota convertible es un título de deuda que puede canjearse por acciones bajo términos fijos.
Cipher destinará unos 70 millones de dólares a operaciones de capped call para reducir la dilución y empleará el resto en proyectos de infraestructura: construcción del centro de datos Barber Lake, aceleración de su estrategia HPC en una cartera de 2,4 GW y ampliación de emplazamientos en desarrollo. Estos usos alinean el financiamiento con la expansión de capacidades y el despliegue de su pipeline.
¿De qué se trata esta operación de Cipher Mining?
La operación incorpora mecanismos para limitar la dilución y ofrecer flexibilidad financiera. Cipher contrató capped calls con entidades financieras que fijan un tope de conversión en 23,32 dólares por acción, un 100 % por encima del precio del 25 de septiembre de 2025, lo que reduce el efecto dilutivo si las notas se convierten.
Además, la compañía puede recomprar las notas en efectivo a partir del 5 de octubre de 2028 si la acción supera el 130 % del precio de conversión durante un período determinado. Estos elementos muestran que Cipher prioriza la inversión en infraestructura sin pagar intereses de forma inmediata, aunque aumenta la posibilidad de dilución futura y la dependencia de la apreciación de la acción para evitar conversiones o pagos elevados.
La liquidación de la oferta será el 30 de septiembre de 2025 y, marcará el inicio de las inversiones en Barber Lake y el despliegue del pipeline HPC. El valor futuro para los accionistas dependerá de la ejecución y de cómo impacte en la estructura de capital.