Aster ha emitido una declaración oficial confirmando que su estructura tokenómica permanece sin cambios, tras una actualización errónea en agregadores de datos que causó alarma generalizada entre usuarios y operadores. La confusión surgió cuando CoinMarketCap y Binance publicaron información incorrecta sobre los cronogramas de desbloqueo del token ASTER, provocando una caída significativa en su precio. La empresa aclaró que los informes incorrectos alteraron vestings y trataron asignaciones no liberadas como oferta circulante.
La situación se originó a finales de 2025 cuando CoinMarketCap y Binance publicaron datos que sugerían modificaciones en los cronogramas de desbloqueo del token ASTER, indicando retrasos que supuestamente llegaban hasta 2026 y 2035. Esta información incorrecta confundió asignaciones sin liberar con la oferta en circulación, generando una percepción de mayor presión vendedora en el mercado.
Como consecuencia directa, el precio del token ASTER sufrió una caída reportada del 20%, descendiendo desde niveles superiores a $2 hasta aproximadamente $1,70, según fuentes citadas por la comunidad. Ante esta situación, Aster negó categóricamente cualquier modificación en su modelo económico, explicando que las discrepancias provenían exclusivamente de errores en plataformas externas.
Para aumentar la transparencia y contrarrestar la desinformación, la compañía transfirió tokens a una cartera pública y emitió comunicados aclaratorios. Mientras tanto, DeFiLlama llegó a excluir los datos de futuros perpetuos de Aster en octubre de 2025, citando «suspicious on-chain patterns» como justificación.
La confusión del mercado y la respuesta de Aster
Aster recordó que su estructura tokenómica permanece inalterada, con un suministro máximo de 8.000 millones de ASTER distribuidos en diferentes asignaciones con períodos de liberación específicos:
La empresa enfatizó que tratar las asignaciones aún no liberadas como parte de la oferta circulante constituye una mala interpretación de la mecánica de suministro y demanda, aclarando que estas unidades permanecen fuera del mercado hasta su liberación efectiva.
Tras las aclaraciones oficiales, se registró un repunte reportado entre 10% y 12%, impulsado por compras de grandes actores, aunque las cifras de precio posteriores contienen inconsistencias en las fuentes y no pudieron verificarse independientemente.
