El debut del Grayscale Dogecoin Trust ETF (GDOG) en NYSE Arca dejó una reacción de mercado intermedia. Dogecoin bajó un 1,4% tras el estreno y quedó cerca de $0,1478, sin superar la resistencia en $0,1495. El lanzamiento ofrece una vía regulada para inversores tradicionales, pero la respuesta inicial sugiere que la legitimación institucional no garantiza un impulso inmediato al precio de DOGE.
La cotización de GDOG comenzó a operar el mismo día que su gemelo GXRP; Dogecoin registró subidas previas al lanzamiento (3–10%), pero retrocedió tras la apertura, situándose en torno a $0,1478.
Los analistas habían proyectado un volumen de negociación de día uno de hasta $11 millones, una cifra que se considerará crítica para medir la absorción del producto por el mercado. La capitalización y el flujo de entrada determinarán si el comportamiento inicial se mantiene o si predomina la dinámica de “buy the rumor, sell the news”.
Grayscale ofreció una estructura de comisiones diseñada para atraer capital: 0% de comisión inicial que pasará a 0,35% una vez que el fondo alcance $1.000 millones de activos o transcurran tres meses, lo que crea un incentivo temporal a la suscripción masiva.
En paralelo, otros lanzamientos recientes sirven como punto de comparación; por ejemplo, un ETF alternativo de XRP consiguió primeros días con volúmenes robustos (alrededor de $59 millones), lo que permitirá calibrar la demanda relativa por GDOG.
Implicaciones a medio y largo plazo
El estreno de GDOG representa una validación institucional para Dogecoin y amplía el acceso de inversores tradicionales, incluidos los gestionadores de planes de pensiones, según Grayscale, que afirmó que DOGE “se ha convertido en una herramienta práctica para avanzar en la accesibilidad financiera”. Esta incorporación puede aumentar liquidez y atenuar parcialmente la volatilidad si el volumen de entrada es sostenido.
No obstante, factores estructurales persisten: la oferta inflacionaria de DOGE, su dependencia de sentimiento comunitario y eventos en redes sociales, y su correlación con Bitcoin, que en el periodo del debut rondaba $79.000, mantienen su vulnerabilidad.
El historial de Dogecoin incluye caídas pronunciadas —una baja del 76% desde el pico de mayo de 2021 y otra del 48% en 2025—, lo que recuerda que el ETF es un vehículo para un activo aún altamente especulativo. Si GDOG no logra volúmenes continuos, el precio podría retroceder hacia $0,13 según escenarios cautelosos que analistas han señalado.
La competencia de gestoras como Bitwise, 21Shares y Rex-Osprey, que han presentado sus propios productos, añade presión para captar cuota de mercado y definir comisiones y liquidez de referencia en el segmento de memecoins reguladas.
El lanzamiento de GDOG es un hito para la institucionalización de Dogecoin, pero su efecto sobre el precio dependerá de la capacidad del ETF para atraer y mantener volúmenes reales más allá del periodo promocional.
