La principal bolsa de derivados de Singapur, SGX Derivatives, introducirá dos nuevos productos financieros a finales de este mes, citando un creciente interés profesional en el sector. Este lanzamiento estratégico busca satisfacer la demanda institucional de criptomonedas actual, facilitando una convergencia segura y regulada entre los ecosistemas de las finanzas tradicionales y los activos nativos digitales, según el anuncio oficial de la entidad.
Por otro lado, los nuevos contratos de futuros perpetuos de Bitcoin y Ether estarán disponibles para su negociación a partir del 24 de noviembre. Estos instrumentos permitirán a los inversores acreditados y expertos gestionar su exposición al precio de los activos subyacentes sin fecha de vencimiento, operando bajo la estricta supervisión de la Autoridad Monetaria de Singapur (MAS) para garantizar el cumplimiento normativo.
¿Representa este movimiento la integración definitiva de los activos digitales en las finanzas tradicionales?
Asimismo, es importante destacar que este marca el segundo lanzamiento de futuros basados en criptoactivos en la región, siguiendo la pauta establecida por EDXM International en julio. De este modo, Singapur continúa su adopción cautelosa pero firme, expandiendo su marco de activos digitales mientras mantiene una postura regulatoria rigurosa, donde las empresas que violen las normativas vigentes enfrentan multas severas y posibles penas de prisión.
No obstante, la estructura de estos derivados perpetuos ofrece una ventaja significativa al eliminar la necesidad de custodia física de los tokens. Por ende, se espera que estos contratos se conviertan en una fuente de ingresos significativa para la bolsa, dado que los futuros perpetuos se encuentran entre los derivados más negociados activamente a nivel mundial en el entorno de las criptomonedas.
Para finalizar, Singapur se posiciona en el puesto 15 del índice global de adopción, demostrando que la claridad regulatoria atrae capital. La introducción de estos productos refuerza la infraestructura financiera del país, ofreciendo a los grandes inversores herramientas sofisticadas para navegar la volatilidad del mercado sin los riesgos operativos de la tenencia directa.
