Bitcoin (BTC) experimentó una caída abrupta, llegando justo por encima de los $100.000 el lunes por la noche. El precio rebotó ligeramente hasta los $101.000 poco después. Esta volatilidad generó una ola masiva de liquidaciones forzadas en criptomonedas. Estas ventas automáticas eliminaron miles de millones en posiciones especulativas apalancadas. Los datos de la plataforma CoinGlass indicaron que más de $2 mil millones en contratos de futuros fueron liquidados durante la jornada del martes, marcando una jornada roja.
Las pérdidas se concentraron de forma abrumadora en los operadores alcistas (longs). Ellos representaron casi el 80% del total, sumando $1.6 mil millones en pérdidas directas. Las liquidaciones de futuros ocurren cuando los traders que usan fondos prestados ven caer su margen por debajo de los niveles requeridos. En ese punto, las plataformas cierran automáticamente sus posiciones para cubrir las pérdidas. Este evento de desapalancamiento es uno de los mayores registrados desde septiembre. La acción del precio subraya cuán frágil se ha vuelto el posicionamiento reciente del mercado.
El impacto no se limitó a Bitcoin, que acumuló una caída del 5.5% en el día y más del 10% en la última semana. Otras criptomonedas importantes del mercado sufrieron caídas aún más pronunciadas. Ether (ETH) se desplomó un 10% hasta ubicarse en $3.275. Por su parte, SOL de Solana y BNB perdieron 8% y 7% respectivamente. Activos como XRP, Dogecoin y Cardano también registraron caídas de entre 5% y 6%. La capitalización total del mercado cripto retrocedió hacia los $3.5 billones. Este es su nivel más bajo en más de un mes.
¿Es esta volatilidad una señal de alarma o una simple corrección del mercado?
Gerry O’Shea, jefe de análisis de mercado global en Hashdex, ofreció comentarios sobre la situación. Explicó que «Bitcoin cotizó alrededor de $100.000 el martes mientras el sentimiento de aversión al riesgo se apoderaba de los mercados financieros». O’Shea señaló que esto impactó a una amplia gama de activos digitales, acciones y materias primas. Además, preocupaciones macroeconómicas están influyendo en el precio. Entre ellas se cuentan especulaciones de que la FOMC podría no realizar otro recorte de tasas este año. También afectan los temores sobre aranceles y las condiciones del mercado crediticio.
Las plataformas de intercambio (exchanges) registraron una actividad frenética. Según los datos, Bybit lideró las liquidaciones con un total de $628 millones. Le siguieron Hyperliquid con $533 millones y Binance con $421 millones. El mayor cierre individual reportado fue una posición larga de BTC-USDT de $11 millones en la plataforma HTX. Este tipo de eventos masivos de liquidación pueden señalar una capitulación, creando potenciales fondos a corto plazo.
A pesar de la fuerte volatilidad, los analistas mantienen una visión constructiva a largo plazo. O’Shea afirmó que, si bien «$100.000 puede ser un nivel de soporte psicológico importante«, la acción del precio del martes no es vista «como una señal de debilitamiento del caso de inversión a largo plazo para Bitcoin». No obstante, con la Reserva Federal en pausa y el apetito de riesgo global aún frágil, las próximas sesiones serán clave. Estas probarán si el rebote de Bitcoin puede sostenerse o si se avecina otra ola de ventas forzadas en el horizonte.
